Los exámenes de ADN de relación familiar son pruebas que permiten identificar y confirmar vínculos de parentesco entre personas, como entre padres e hijos, abuelos y nietos, o incluso entre primos y tíos. Estas pruebas se basan en el análisis de los patrones genéticos que se heredan de los padres y se comparan entre las muestras de los participantes. El examen de abuelidad, por ejemplo, es utilizado para verificar si un hombre es el abuelo biológico de un niño, mientras que los exámenes de paternidad y maternidad son fundamentales para confirmar la relación entre un hijo y su padre o madre. Las pruebas de hermandad se usan para confirmar si dos personas comparten uno o ambos padres biológicos, mientras que los exámenes entre primos y tíos/sobrinos determinan conexiones familiares más distantes.

Estos exámenes de ADN tienen una alta precisión y son útiles en diversas situaciones, desde disputas legales hasta la búsqueda de familiares biológicos. Los exámenes de paternidad son especialmente comunes en casos de custodia de hijos o cuando hay dudas sobre la identidad biológica de un niño. Por otro lado, los exámenes de ADN entre tíos y sobrinos, o entre abuelos y nietos, son útiles en la resolución de casos donde la paternidad o maternidad es incierta, y se necesitan pruebas adicionales para corroborar los lazos familiares. Estos exámenes también pueden ser importantes en investigaciones genealógicas o cuando se desea obtener más información sobre los antecedentes familiares.